En recuerdo de Gotzon Elortza

Ha fallecido Gotzon Elortza, precursor del cine realizado íntegramente en euskera. En nombre de la Filmoteca Vasca, en estos momentos difíciles, queremos ensalzar su figura y su legado. En una época en la que la cultura audiovisual prevalece sobre el resto de expresiones culturales, resulta curioso comprobar lo desconocidos que resultan los primeros pasos dados en este sector.

Gotzon Elortza (Bilbao, 1923) fue la persona que rodó los fotogramas del primer trabajo audiovisual realizado íntegramente en euskera. Para agradecer y dar a conocer su obra, la Filmoteca Vasca restauró y publicó tres de sus películas en 2011. La relación establecida tanto con Gotzon Elortza como con su familia a raíz del proyecto de restauración de su obra, sentaron las bases de un vínculo enriquecedor y fructífero. De esta manera, la Filmoteca Vasca consiguió restaurar las primeras películas pensadas, rodadas y montadas íntegramente en euskera, con la finalidad de que las siguientes generaciones sepan en un futuro cómo se dieron aquellos primeros pasos. 

Elortza, delineador de profesión, estuvo exiliado en Paris junto con su mujer (Bisi Unanue). Según comentaba, un día leyó en un diario francés que las lenguas minoritarias no tendrían futuro a menos que participaran en trabajos audiovisuales. De este modo, decidió realizar escapadas de dos o tres días a Euskal Herria para rodar algunas películas. Siempre a escondidas, huyendo de la policía, pero finalmente consiguió rodar las primeras películas realizadas íntegramente en euskera. La tres películas restauradas por la Filmoteca Vasca son Ereagatik Matxitxakora (1959), Aberria (Erria, 1961) y Elburua Gernika (1962). Elortza también rodó un documental titulado Avignon (1963).

Elortza quiso mostrar un punto de vista general sobre Euskal Herria (Bizkaia, sobre todo) en sus películas. Además, aparte de los hermosos paisajes que muestran sus películas, también se vislumbra un profundo conocimiento sobre la cultura vasca. En la película Aberria (1961), participan los bertsolaris Balentin Enbeita y Jon Lopategi y el bailarín Víctor Olaeta, todos ellos exponentes de la cultura vasca de la época.

Hoy nos viene a la memoria la visita que realizó el pasado mes de septiembre al Festival de Cine de San Sebastián, con motivo del acto de presentación de las restauraciones llevadas acabo por la Filmoteca Vasca. Elortza acudió junto con sus familiares, y estuvo charlando animadamente con los asistentes al acto tanto en euskera como en francés (en la lengua con la que se familiarizó durante sus años de exilio en París). Tras la proyección de parte de su filmografía en los Cines Príncipe, Gotzon recibió una ovación del público a la que respondió levantando los brazos y saludando emocionado a los asistentes. En los instantes en los que se prolongó aquel reconocimiento a su labor, se fusionaron varias décadas de nuestra triste historia. El camino emprendido por aquel hombre de mirada viva y complexión alargada, ha situado a Elortza entre los más grandes de nuestro cine para siempre.

¡Hasta pronto, Gotzon!

Ion López y Joxean Fernández

Filmoteca Vasca